miércoles, 11 de noviembre de 2009

en proceso de cambio...

La oscuridad se extiende arrinconando la alegría y liberando lo que la Caja de Pandora ocultaba, mientras lucho por encerrar los temores de nuevo bajo llave.
Es una lucha desigual, esta vez me ha pillado con la guardia bajada, no sé en que momento empezaron los cambios, pero ha sido todo tan deprisa que no me dio tiempo a prepararme para lo que se avecinaba. Debí suponerlo, al fin y al cabo siempre es igual.

Aunque puede que sea mejor así, es más duro caer lentamente, ver que se hace de noche a tu alrededor y que no puedes hacer nada. Hasta que la oscuridad es completa no puedes buscar el origen de la luz, hasta que no te has hundido del todo no puedes buscar apoyo e intentar levantarte.

Los síntomas son conocidos, picor en los ojos, desgana, horas en la cama, música acompañando el sentimiento y haciendo aflorar la pena, regodeo en el dolor, opresión en el pecho, tristeza desatada, autocompasión, debilidad…

Pero es solo el tránsito, el proceso de adaptación, el puente a una nueva etapa…
El mundo gira, la gente anda su camino, y no siempre puedo seguirles el paso, aunque a veces me pregunto si es porque no debo, porque algo me lo impide o quizás porque soy demasiado débil.

La soledad se abalanza sobre mí mientras intento expulsarla con toda la fuerza que dan de si mis pulmones. Intento expulsarla luchando con uñas y dientes. Hace tiempo que no experimento la sensación de ser poseída por la indiferencia y la apatía que la acompañan, pero no quiero sentirme así, no quiero derrotarme a mí misma con pensamientos que me van destruyendo poco a poco, corroyendo mi corazón hasta dejarlo exhausto.

Pero no caeré sin presentar batalla, ya me he rendido otras veces, decidí no volver a hacerlo. Seguiré adelante, si los demás encuentran su destino yo encontraré el mío propio. Encontraré mi camino, y elegiré quien quiero que lo comparta conmigo, quien puede acompañarme y hasta dónde o cuando. Solo yo puedo decidir que va a ser de mi.

Lucharé, lucharé, con pensamiento positivo y entusiasmo…

Pero eso lo dejo para mañana, hoy no tengo ánimos para levantarme de la cama, tengo música con canciones melancólicas, una novela de desamor y un paquete clínex, por el momento es suficiente, aun no me he dejado vencer, solo he pospuesto la batalla hasta haberme deshecho un poco de la congoja que tengo dentro…

Nana